Teodosio I. El emperador olvidado

Por todos es conocido que en Sevilla, más concretamente en Itálica, nacieron dos emperadores romanos, Trajano y Adriano. Pero estos no fueron los únicos.

Flavio Teodosio, conocido como Teodosio I o Teodosio El Grande, nació el 11 de enero del 347 d.C. en Hispania, concretamente en un lugar entre Itálica y la ciudad de Hispalis. Fue el último emperador del Imperio Romano antes de su división y durante su reinado, mediante el Edicto de Tesalónica, el cristianismo se convirtió en la religión oficial del Imperio Romano.

Es complicado entender cómo siendo Teodosio I alguien tan importante para la historia, haya caído en el olvido de la ciudad. No obstante, esto es explicable ya que actualmente es aceptado su lugar de nacimiento en Coca (Segovia) junto con el de Itálica.

 

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Busto de Teodosio I en Coca, Segovia.

 

Gracias al trabajo realizado por Alicia M. Canto podemos recuperar para la historia la verdadera procedencia del emperador Teodosio I. Procedencia que era bien conocida desde el mismo nacimiento del emperador hasta final del siglo XIX, cuando por influencia de textos extranjeros se extendió la idea del nacimiento del emperador en Cauca, actual Coca, provincia de Segovia. Autores como  Emil Hübner o A. Shulten entre otros se decantaron por esta teoría y rápidamente fue acogida por los historiadores españoles.

Esta hipótesis sobre el nacimiento en Cauca se fundamentaba exclusivamente en dos autores antiguos, Hidacio y Zoísmo, ninguno de los cuales fue coetáneo ni próximo al emperador. Además en ambos se aprecian incongruencias, como por ejemplo en el caso de Hidacio, donde en su códice más antiguo conservado actualmente no se aprecia mención ninguna sobre que la localidad de nacimiento del emperador fuera Cauca, lo que puede suponer que fue añadido con posterioridad en las diferentes copias realizadas. En cuanto a Zoísmo, la crítica filológica e historiográfica moderna es bastante escéptica con él, y más en este tema en concreto, teniendo en cuenta su tendencia anticristiana y que consideraba a Constantino y a Teodosio como los culpables de la decadencia de Roma.

Pero incluso aceptando estas incongruencias, hay una mayor que se repite en estos autores, ya que en ambos se menciona como lugar de nacimiento del emperador a Cauca de la provincia de la Gallaecia, lo cual supone un error en sí mismo, ya que la Cauca romana, siempre perteneció (desde Diocleciano/Constantino) a la provincia administrativa Carthaginensis y a la metrópolis eclesiástica de Toletum (actual Toledo).

 

 

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Extensión «problemática» de Gallaecia. (De : A. TRANOY, Hydace.
Chronique, 1974, t. 11, mapa 11, del Laboratoire de Cartographie Historique, Bordeaux).

 

Quedando claro que la hipótesis del nacimiento de Teodosio en Cauca es bastante difícil de aceptar como válida, tocaría ahora demostrar o recordar el por qué desde su nacimiento y hasta final del siglo XIX se consideró que la zona entre Itálica e Hispalis fue el lugar de nacimiento del último emperador romano. Para esto volvemos a recurrir al excelente trabajo realizado por Alicia M. Canto y nos encontramos con que las fuentes que defienden esta hipótesis son no sólo coetáneas con el emperador, sino que también son mucho más abundantes a lo largo de la historia.

El primer autor y más fiable que nos deja claro dónde nació el emperador fue Claudio Claudiano, dado que este vivió durante la época de Teodosio y es considerado como el último de los grandes poetas clásicos. Claudio Claudiano relaciona en sus escritos al emperador con la Baetica, el río Baetis, la domus Ulpia, Trajano, el océano y el golfo de su nacimiento. Esto último puede distraer al lector pero es fácilmente entendible, pues en época romana, como ha quedado demostrado en los últimos tiempos, el océano entraba en lo que actualmente es la desembocadura del Guadalquivir, formando un gran golfo y dejando el océano a escasos 10-15 km de Hispalis.

Siendo esta, en mi opinión, la fuente más fiable para determinar la procedencia de Teodosio I, es justo también mencionar otras fuentes que a lo largo de los siglos seguían proclamando esta tierra como el lugar de nacimiento del último emperador romano. Son los casos de El Conde Marcelino, considerado una de las fuentes del Bajo Imperio más dignas de confianza, quien relaciona a Teodosio directamente con Itálica, o por otro lado, Al-Rasís, prestigioso historiador hispano-árabe, andalusí y cordobés quien indicaba el nacimiento del emperador en un lugar a la par de Sevilla (Hispalis). Y estos no son los únicos casos, ya que la tradición historiográfica española entre los siglos XVI y XIX también así lo hacía constar, poniendo como ejemplo los de Francisco de Medrano y Rodrigo Caro.

 

 

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CLAUD., de IV cons. Hon. v. 18-23

 

Por todos estos motivos expuestos, es lógico considerar que Teodosio I o Teodosio el Grande, nació entre Itálica e Hispalis, lo que actualmente es la provincia de Sevilla y que por lo tanto es justo recordar para la historia y no dejar en el olvido que fueron tres y no dos los emperadores romanos nacidos en esta tierra.

Por desgracia Sevilla es una ciudad que olvida fácilmente a sus hijos y que además no siempre sabe recordarlos, pues teniendo tres emperadores romanos nacidos aquí, hasta hace bien poco estos sólo eran recordados con sendos nombres en el callejero de la ciudad, y únicamente Trajano cuenta con un monumento, regalo del gobierno de Rumanía, pues es en aquel país donde este último emperador sí es bien recordado. No se puede decir lo mismo de Teodosio I, el cual lleva más de 100 años en el olvido de la ciudad.

Por Daniel Reyna García


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